lunes, 7 de noviembre de 2011

Metodología y eficacia del ataque en el voleibol














Introducción
    El correcto conocimiento de las cualidades físicas solicitadas en un determinado deporte es imprescindible a la hora de planificar los entrenamientos. En tal sentido, debemos conocer la cantidad y los tipos de saltos que realizan los jugadores de voleibol durante un partido. Los diferentes niveles de competencia pueden llevar a diferentes solicitaciones físicas. Por lo tanto, creo que a veces puede no ser apropiado trasladar las investigaciones realizadas con selecciones nacionales en competencias internacionales a la hora de entrenar a un equipo de nivel nacional o regional. En este estudio, evalué la cantidad y los tipos de saltos que efectuaron las jugadoras de uno de los mejores equipos de voleibol femenino de la República Argentina en una serie de 7 partidos oficiales. Estos resultados son de gran valor a la hora de planificar los entrenamientos técnico - tácticos y físicos.

Materiales y Métodos
    La investigación se desarrolló durante una competencia oficial de voleibol, la Liga Femenina Metropolitana de Voleibol de la República Argentina en la segunda rueda de su fase regular. Este torneo es uno de los más importantes y prestigiosos del país. El equipo evaluado fue la División de Honor del Club de Gimnasia y Esgrima La Plata (G.E.L.P.), uno de los mejores equipos femeninos de la Argentina, doble campeón de la Liga Nacional de Clubes (2000 y 2001), doble campeón de la Liga Metropolitana (2000 y 2001) y, al momento de realizado este estudio, puntero de la Liga Metropolitana 2002.
    El seguimiento se realizó durante 7 partidos entre el 30/6/02 y el 17/8/02. Únicamente se contabilizaron los saltos de G.E.L.P. Se jugaron 23 sets.
    La contabilización de los saltos se hizo de manera individual por jugadora. Luego se sumaron por puestos y se dividieron por cantidad de jugadoras en cada puesto (1 armadora, 2 puntas, 2 centrales, 1 opuesta y 1 líbero). Lo explicaré con el siguiente ejemplo: supongamos que jugaron a lo largo de un partido 4 centrales, una saltó 16 veces, otra lo hizo en 49 oportunidades, y las otras dos saltaron 9 y 20 veces. Si lo sumamos nos da un total de 94 saltos. Lo dividimos por dos (son dos las centrales que siempre juegan en la cancha) y nos da 47 saltos por central. A su vez, este número se divide por la cantidad de sets disputados. Suponiendo que fueron tres sets, el resultado es 15,6 saltos por central por set.
    Todos los saltos están clasificados en saltos de bloqueo, de remate y otros saltos. En este último grupo incluí a los saltos que realizan las jugadoras que utilizan saque de potencia, los saltos que usa la armadora para armar, los saltos que a veces se realizan para defender, y los saltos de amague (por ejemplo, la jugadora simula con un salto de menor intensidad que va a rematar, pero lo hace otra jugadora).

Resultados
    He dividido la cantidad de saltos por set y no por partido, ya que los mismos pueden presentar diferentes cantidades de sets disputados. De todos modos, mencionaré los resultados y la duración de los encuentros:
  • G.E.L.P versus Ciudad de Buenos Aires: 3 - 0.
  • G.E.L.P. versus C.A.B.N.A.: 3 - 1.
  • G.E.L.P. versus Italiano: 3 - 1.
  • G.E.B.A. versus G.E.L.P.: 0 - 3.
  • G.E.L.P. versus River: 3 - 0.
  • U.B.A. versus G.E.L.P.: 0 - 3.
  • G.E.L.P. versus Bella Vista: 3 - 0.
    En promedio, cada partido duró 1 hora 22 minutos (rango: 1 h 10 min. - 1 h 50 min.)
    En esta serie de partidos las jugadoras de G.E.L.P. saltaron 1.802 veces, correspondiendo el 50% (895) a saltos de bloqueo, el 35% (639) a saltos de remate, y el 15% (268) a otros saltos. Si estos números los dividimos por la cantidad de sets (23), tenemos 78 saltos por set (39 de bloqueo, 28 de remate y 12 de otros saltos). (Tabla 1).

Tabla 1: cantidad de saltos en la serie de partidos, totales, por tipo de salto y por set.
    Al clasificar los saltos por puesto arribamos a los resultados que se observan en la tabla 2.
    Es importante mencionar que algunas jugadoras, sin importar en el puesto que jueguen, saltan más o menos durante el partido según su función específica en el equipo y si son titulares o no. También hay que destacar que G.E.L.P. juega con líbero. Los líberos entran generalmente por una central que se halla en posición 1; 5 o 6. Este cambio táctico le significa a las centrales un descanso que no suelen tener el resto de las jugadoras. Esta situación debe ser tenida en cuenta a la hora de analizar el desgaste físico de las deportistas y al planificar los entrenamientos. Mostraré los resultados obtenidos en cada jugadora. (Tabla 3). En esta tabla pueden observarse que, si bien hay una tendencia similar en los tipos y cantidad de saltos que desarrollan las jugadoras que pertenecen a un mismo puesto, puede haber diferencias significativas entre estas jugadoras según la función específica de las mismas dentro de la cancha. A las jugadoras suplentes no se les contabilizó la cantidad de sets jugados.

Tabla 2: cantidad de saltos por puesto y por tipo de salto
(total en la serie de partidos, promedio por jugadora de cada puesto, promedio por set por jugadora).

Tabla 3: cantidad y tipos de saltos por jugadora.

Discusión
    Es importante tener datos de los equipos a los cuales entrenamos. No siempre los datos publicados en las principales revistas del mundo pueden sernos del todo útiles y precisos. Por ejemplo, no siempre resulta útil comparar la altura del salto en una población escolar infantil rusa con una población argentina, ya que ambos grupos tienen formaciones deportivas diferentes. Del mismo modo, trasladar las evaluaciones de la cantidad de saltos que lleva a cabo una selección nacional de primer nivel a un equipo de menor categoría puede no ser del todo acertado.
    Giuliano Fontani y cols. en un trabajo en el cual analizaron el cambio de reglas de juego y el empeño físico en el voleibol contabilizaron la cantidad de saltos que realizaron jugadores masculinos y femeninos durante cuatro partidos oficiales. En esta serie los armadores eran los que más saltaban, seguidos por los centrales, opuestos y puntas. Esto se repitió al analizar a los equipos femeninos. Estos datos no coinciden con la serie de partido que yo he analizado en este estudio.
    Los mismos autores comparan dos partidos internacionales. Uno con sistema de juego con cambio de saque (S.C.S.) y otro con las nuevas reglas (R.P.S.: Rally Point System). Los partidos analizados fueron S.C.S.: Italia - Holanda 3 -2 (1993) y R.P.S.: Sisley - Palermo 2 -3 (2000).

    Estos valores (R.P.S.) son similares a los nuestros en los jugadores opuestos y puntas, pero muy diferentes en los armadores y centrales.
    En la búsqueda de tener datos propios que me sean útiles al trabajar con mi equipo he realizado diversas investigaciones que han sido publicadas en otros trabajos. Algunos de estos resultados han sido de gran utilidad no sólo a G.E.L.P. sino también a otros equipos de voleibol. 1 - 2 - 3 - 4
    Al planificar los entrenamientos de mis jugadoras me he preguntado varias veces cuál sería la cantidad óptima de saltos a ejecutar. También dentro de nuestro cuerpo técnico hemos discutido sobre la necesidad de cuantificar el trabajo físico que significa el entrenamiento técnico - táctico. Por lo tanto, resultaba imprescindible realizar una investigación que permitiese contabilizar la cantidad y los tipos de saltos que realizaba cada jugadora. También era importante conocer cuántos saltos podía realizar cada jugadora sin que haya una disminución importante de la altura de su salto.
    En un trabajo previo2 evalué la saltabilidad del equipo durante un torneo oficial a lo largo de cinco partidos luego de haber realizado diferentes entradas en calor y al finalizar el partido. En dicha investigación, el equipo saltó en cuatro oportunidades un 2% más (rango: 1,2% - 2,8%) en el salto con contramovimiento después del partido que al finalizar la entrada en calor. En el restante quinto partido, la altura del salto descendió tan solo un 0,1 %.
    En otro trabajo4 que llevé a cabo con la mayoría de los equipos de la Liga Metropolitana Femenina he observado resultados similares al evaluar la resistencia al salto pre y post - partido mediante el test de saltos continuos durante 15 segundos. Las evaluaciones se llevaron a cabo con todas las jugadoras de ambos equipos, por lo cual los resultados son numerosos y muy confiables.
    Todas estas investigaciones me permiten aseverar que una jugadora puede realizar la misma cantidad de saltos que desarrolla durante el partido sin perder altura. Es importante mencionar que todos estos saltos deben ser ejecutados durante el tiempo que dura el partido (1 a 2 horas). Es de suponer que no se mantenga la misma altura si el mismo número de saltos que se ejecuta a lo largo de un partido se ejecuta en un tiempo menor. Con el mismo razonamiento, es posible suponer que puedan ejecutarse mayor cantidad de saltos con la misma potencia si las pausas son mayores.
    Acuerdo plenamente con Jorge Hegedüs6 en que carga y recuperación son dos caras de la misma moneda. En saberlas combinar reside la verdadera ciencia del entrenamiento deportivo.
    Por lo tanto es imprescindible tener investigaciones contundentes que nos lleven a planificar cuánto cargar y cuánto recuperar a nuestros deportistas. A la luz de todas estas investigaciones propongo la siguiente metodología de trabajo en función de los diferentes objetivos buscados.
Entrenamiento de igual duración a un partido (1 a 2 horas).


Entrenamiento de menor duración a un partido (30 minutos a 90 minutos).


Entrenamiento de mayor duración a un partido (2 horas a 3 horas).

    El volumen por entrenamiento está en función del volumen que cada jugadora realiza por set. Es decir, que si el entrenamiento dura 1 hora (sin incluir el calentamiento), podría ser comparado a un partido de 3 sets. Luego, si una jugadora salta 15 veces por set, en ese entrenamiento su 100% serán 45 saltos (15 saltos x 3 sets).
    Esta propuesta no debe ser tomada en forma estricta. Es importante tener en cuenta las otras ejercitaciones que se llevarán a cabo en el entrenamiento. Por ejemplo el entrenamiento con pesas o ejercicios de defensa pueden llevar a una fatiga precoz que imposibilite realizar las cantidades recomendadas. Del mismo modo, entrenamientos intensos previos pueden impedir realizar una gran cantidad de saltos. Por último, dependiendo de la fortaleza de cada jugadora podrán ejecutarse mayor o menor número de saltos.
    Lo que hay que destacar es que si buscamos que el gesto sea explosivo, se deben realizar pocas repeticiones y largas pausas. Si la potencia del salto o la calidad técnica no son lo más importante, entonces sí se puede trabajar con mayor fatiga.

Bibliografía

  • Esper, A.: El entrenamiento de la potencia aeróbica en el voleibol. Revista digital de Educación Física y Deportes, año 7, nro. 43, Diciembre de 2001. - http://www.efdeportes.com/efd43/volei.htm

  • Esper, A.: Influencia de diferentes entradas en calor en la saltabilidad. - Revista digital de Educación Física y Deportes, año 8, nro. 50, Julio de 2002. - http://www.efdeportes.com/efd50/saltab.htm

  • Esper, A.: Influencia de diferentes ejercitaciones realizadas durante un partido de voleibol en el mantenimiento de la saltabilidad. - Revista digital de Educación Física y Deportes, año 8, nro. 50, Julio de 2002. - http://www.efdeportes.com/efd50/saltab.htm

  • Esper, A.: Evaluación del salto en equipos de voleibol femenino de primera división de la Argentina en competencia. - Revista digital de Educación Física y Deportes, año 8, nro. 53, Octubre de 2002. - http://www.efdeportes.com/efd43/volei.htm

  • Fontani G, Ciccarone G, Giulianini R: Nuove regole di gioco ed impegno fisico nella pallavolo. - SdS - Scuola dello Sport, año 19, nro. 50, Octubre - Diciembre de 2000, págs. 14 - 20.

  • Hegedüs, J.: La ciencia del entrenamiento deportivo. Edit. Stadium. Buenos Aires, 1985.